Colón no pudo superar a Gimnasia de
Jujuy y sumó un punto híbrido pero útil para mantenerse en el segundo lugar de
la tabla, metido en el grupo de los cinco que ascienden. El partido fue muy
discreto. Dos equipos que se conocían muy bien no se brindaron ventajas y la
historia culminó en un previsible empate.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhENoBcTary42rHkUeOILBVuddGlejinPUMDYaV4NBAMCI1JFJegJfGf-yEsFFUFXgPoCfhsB78xp2A6300VStWSI8XeoIrj8vN_y7gM74qW1BWy3hC_JrCN1UYHcOI1E4qHZOWRZ06fwp0/s1600/106095_colon_2.jpg)
Por eso no fue casualidad que al inicio
del complemento el sabalero ingresara con dos modificaciones. Con la inclusión
de Ramírez y Telechea, el técnico intentó cambiarle la cara desde el banco,
como ocurrió ante Douglas Haig. Pero esta vez no resultó. Porque Gimnasia es
una formación mejor preparada tácticamente, que rápidamente se adaptó a la
nueva forma de su rival, lo esperó en su terreno y le cerró casi todos los
caminos.
Otra vez Cristian Pavón fue el jugador
sabalero más desequilibrante, pero en esta oportunidad su actuación no fue
determinante para el resultado. El cordobés inquietó por la izquierda pero fue
bien controlado por López. Ese fue uno de los pocos recursos que Colón explotó
en ofensiva. Por lo demás se mostró como un cuadro incapaz de encontrar
variantes para romper el cerco jujeño en el complemento. Es rescatable el mensaje
que el DT envió con los cambios. Además de las modificaciones en el inicio del
segundo tiempo, luego puso a Curuchet para terminar jugando casi con cuatro
delanteros. El equipo reconoció la orden, mostró una actitud más agresiva y
ambiciosa en la complementaria, pero eso no se tradujo en situaciones claras de
gol. La única alternativa propicia se dio a la salida de un tiro libre que cayó
en el segundo palo. Allí apareció Fernando Telechea para ensayar una chilena
que pasó muy cerca del poste izquierdo. Muy poco para una formación que culminó
en cancha con un dibujo 4-1-3-2 y mucha gente en función ofensiva.
Por su parte, Gimnasia de Jujuy tuvo
dos minutos de inspiración que podrían haber dejado al sabalero con las manos
vacías. A los 27, Berza cabeceó un córner pisando el área chica y provocó una
excelente reacción de Broun que rechazó la pelota con el pie, a puro reflejo. El
rebote quedó corto, para el ingreso solitario de Sebastián Sánchez que punteó
el balón por arriba del travesaño cuando el arco estaba vacío. 60 segundos
después, Lucas Acosta se escapó por la izquierda y envió un centro bajo. El tiro
se desvió en Castillo y fue hacia el arco. Broun fue sorprendido, no pudo
reaccionar y solo se limitó a mirar como la pelota impactaba contra el palo
derecho.
Al final el empate describió con
justicia lo poco que generaron dos conjuntos que se fueron conformes por lo
obtenido y por salir indemnes de un choque que implicaba riesgos.
Así es este Colón, en los últimos
partidos siempre cumple con la cátedra. Al parecer, aquel cachetazo que le
propinó San Martín (SJ) caló más hondo de lo pensado en la cabeza del
entrenador. Osella ya no busca sorprender sino más bien lograr lo necesario o respetar
la lógica. Contra equipos más débiles gana y ante rivales fuertes trata de no
perder, sin importar la condición. Así venció a Douglas e Instituto y empató
contra Boca Unidos y Gimnasia (J). De esa forma está consiguiendo el objetivo
sin sobresaltos: está segundo en la tabla.
A fuerza de ser honestos, ayer el
sabalero intentó algo distinto en el segundo tiempo pero no pudo cambiar el
rumbo del partido. Está demostrado, no solo por lo ocurrido en este encuentro,
que la receta no siempre es simplemente amontonar jugadores en función de
ataque. Hay que darle un sentido de funcionamiento a ese bloque para que los
intérpretes generen relaciones y así produzcan superioridad en la zona de
definición. Esta parece ser todavía una materia pendiente para Colón. Eso que
habitualmente algunos definen como “volumen de juego”.
B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona A - Fecha 13:
Colón 0 – 0 Gimnasia (J)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario