Unión debía plantear un partido sin
accidentes en el trámite, tratar de sacar provecho de las presiones que iba a
soportar All Boys y lograr la diferencia a partir de forzar los errores de un
rival que vive un momento crítico. Pero salió todo lo contrario.
El tatengue fue sorprendido por el
equipo de Ángel Bernuncio que salió a jugar con tres delanteros, decidido a
atropellar de entrada. Al minuto le encontró rédito a esa estrategia con el gol
de Olego. El bloque defensivo rojiblanco quedó desacomodado, permitió que Di
Plácido aparezca solo por la derecha y envíe un centro que cayó en los pies del
delantero. El 7, en evidente posición adelantada, definió de cabeza para abrir
el marcador.
Todo lo que Madelón había planificado
se iba por la borda en 60 segundos. Pero Unión encontró rápidamente el empate. En
la primera llegada clara, logró el 1 a 1 después de un tiro libre de Fabro que
cabeceó Claudio Guerra.
Ese era el momento de parar la pelota. Ahí
el tatengue tendría que haber bajado las revoluciones del encuentro. La paridad
en el resultado le permitía poner el trámite en la velocidad deseada, volver al
plan original. Sin embargo, el cuadro santafesino no pudo abstraerse del ritmo
eléctrico en el que había caído luego de sufrir el primer tanto y lo pagó caro.
All Boys no tardó demasiado en
encontrar el segundo. Otra vez un error en el marcaje defensivo le brindó
ventajas al local. Olego contstruyó una pared con Caruso por la izquierda y
mandó un centro pasado. Por el segundo palo ingresó Di Plácido en soledad y
sometió a Nereo Fernández.
Unión tuvo de nuevo una chance
inmediata pero no pudo igualarlo porque Triverio desperdició un mano a mano. Para
colmo de males se fue al descanso con diez jugadores por la expulsión de
Mariano Mauri, que le pegó un codazo injustificable a Di Plácido.
Así las cosas, la historia en el
complemento se presentaba muy compleja. El conjunto de Madelón salió decidido
pero sin poder elaborar una sola jugada colectiva que lo acercara al arco de
Cambiasso. Los de Floresta, conscientes de la importancia del triunfo que
estaban consiguiendo, se retrasaron demasiado y desaprovecharon
consecutivamente las posibilidades de contragolpe que el rojiblanco brindaba.
El ingreso de Lucas Gamba redundó de
forma positiva en el funcionamiento y recién a la media hora del complemento
Unión pudo armar una acción asociada en ofensiva. Martínez recuperó en el medio
y abrió sobre la derecha para Gamba. El recién ingresado corrió por la banda y
envió el centro para el ingreso en soledad de Enrique Triverio. El delantero la
bajó y clavó una violenta volea que explotó en el travesaño y se metió. En un
solo ataque, el tatengue pudo aprovechar las facilidades defensivas que eran
conocidas en el albo para alcanzar el 2 a 2.
Unión completó un mal partido, sumó un
punto que puede ser positivo según las características que tuvo el juego pero
que lo deja nuevamente en deuda y con dudas en su funcionamiento. El equipo de
Madelón nunca pudo imponerse, repitió viejos desacoples defensivos, exhibió su
habitual poder ofensivo pero mostró otra vez debilidades llamativas del medio
hacia atrás.
El tatengue es un equipo irregular
desde todos los ángulos. En lo que va del torneo y también dentro de los
partidos. Hoy se pudo recomponer de una situación compleja, eso lo puede fortalecer
en lo anímico, pero no resuelve los inconvenientes de rendimiento.
Unión llegará al próximo encuentro con
la obligación de ganar sobre Independiente Rivadavia de Mendoza. Sin margen de
error, tendrá que sumar de a tres para revalidar el punto conseguido en
Floresta. Sino de nada servirá este empate casi heroico después de jugar todo
el segundo tiempo con uno menos.
B Nacional – Torneo Transición 2014 –
Zona B - Fecha 6: All Boys 2 - 2 Unión
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