sábado, 30 de agosto de 2014

Un equipo desconocido para una actuación decepcionante

Colón mostró su peor versión en la era Osella, jugó un partido preocupante y cayó merecidamente a manos de Aldosivi en Mar del Plata. El equipo fue una sombra, cometió errores increíbles en defensa y no repitió nada de lo bueno que había hecho hace una semana en la victoria ante Chicago.
El cuadro santafesino arrancó de forma inmejorable, logrando la apertura del marcador antes del primer cuarto de hora. Alario bajó un pelotazo al pie de Telechea, éste cedió entre líneas para el ingreso de Gustavo Villarruel que definió de forma precisa al primer palo. Así el sabalero insinuaba que la historia podía ser distinta, pero luego del gol se derrumbó en su funcionamiento y fue superado ampliamente por el Tiburón durante todo el encuentro.
Aldosivi encontró el empate rápido y a partir de allí jugó el partido que quiso. Colón no tuvo propuesta, resistencia ni reacción para contrarrestar las virtudes del conjunto de Berti. El local manejó la pelota a placer, fue determinante con la actuación de sus extremos (Lugüercio y Carranza) y aprovechó una de las tantas ventajas que le ofrecieron para ganar el encuentro.
Durante el ciclo Osella el sabalero expuso varias limitaciones en la faz creativa y en el volumen ofensivo. Pero había una virtud que se repetía en cada presentación más allá del resultado obtenido: el orden y la solidez defensiva. Extrañamente esta noche el equipo sufrió en la última línea todos los desajustes que pueden suceder en 90 minutos. Falta de comunicación, desacoples, marcas a destiempo y desconcentraciones fueron cuestiones habituales entre los cuatro hombres del fondo. Facilidades excesivas para un rival que presentaba tres delanteros.
El técnico se deshizo en señas, indicaciones, gritos y ni siquiera los cambios le dieron resultado. Los rendimientos individuales fueron tan bajos que la derrota se dio casi de forma natural, por decantación. Aunque la jugada que marcó el desnivel en el marcador tuvo ribetes increíbles, más relacionados a un partido amateur que a un contexto profesional.
Al igual que en todo el encuentro, Colón se escalonó mal en defensa y descuidó a Lugüercio. Carranza metió un centro desde la derecha y allí se dio lo más parecido a un paso de comedia. Lazzaroni, Landa y Olivera salieron hacia adelante para jugar el offside, mientras Yamil Garnier siguió retrocediendo con el delantero. Cuando el balón cayó en los pies del Payaso, el defensor sabalero levantó su brazo reclamando una inexistente posición adelantada y se quedó totalmente parado. Esto permitió que Lugüercio recibiera en soledad y definiera con absoluta tranquilidad ante un indefenso Broun. Un horror de Garnier para coronar una pesadilla.
Colón venía de golear y dejar una buena imagen contra Chicago. La sensación era que debía ratificar esa idea para fortalecerse en su camino al ascenso. Hoy fue todo lo contrario. No jugó como candidato, mostró debilidades inéditas y tuvo un perfil emparentado con un equipo sin chances de pelear por el retorno.
Será exclusiva tarea del entrenador trabajar, en los pocos días que separan la próxima presentación, en pos de encontrar un rendimiento mucho más parecido a la primera versión y totalmente alejado de esta imagen tan oscura que provoca preocupación.

B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona A - Fecha 4: Aldosivi 2 - 1 Colón

En zona de tranquilidad

Luego de un comienzo con dudas, y después de ganarle con autoridad a Chicago, Colón afronta una jornada por primera vez ubicado en zona de ascenso. Ese detalle de verse entre los primeros cinco lugares de la tabla no es una cuestión menor. Más allá que faltan muchas fechas para el final, ocupar el espacio que todos esperan que el equipo ostente genera tranquilidad y confianza para ir subiendo de a poco la escalera hacia Primera División. Cambia el ambiente de trabajo, fortalece los lazos del grupo y lo hace más impermeable para resistir algún futuro tropiezo.
Para muestra basta la experiencia de Defensa y Justicia en la temporada pasada de la B Nacional. En la previa nadie lo pensaba entre los primeros tres lugares, pero al final no fue sorpresa su ascenso justamente porque logró naturalizar su estadía en esa zona de las posiciones a partir de su desarrollo durante el año. De los tres ascendidos, fue el único que nunca abandonó alguna de las tres primeras posiciones, desde la fecha 1 hasta la 42. El hecho que los jugadores vean al equipo arriba, que la mayoría de los rivales se ubiquen por debajo, provoca una confianza que con el correr de los partidos se transforma en virtud y se hace casi indestructible.
Colón logró cambiar a tiempo para poder llegar a esa zona de tranquilidad más temprano que tarde. Diego Osella entendió que debía cambiar el diseño táctico del equipo y no se casó con el esquema que tantos resultados le había brindado en el pasado. Comprendió que la categoría le demandaba mayor protagonismo y dio un viraje de timón.
Una de las buenas capacidades que tiene el técnico sabalero es llegarle rápido al jugador, hablar claro y con simpleza para lograr que el futbolista incorpore el mensaje sin inconvenientes. Por eso la formación rojinegra tardó solo dos partidos en adoptar con éxito el nuevo perfil. El primer ensayo fue contra River en San Luis y la ratificación llegó cinco días después con la goleada ante Nueva Chicago.

Hoy el escenario es diferente y el rival es distinto. Tal vez el sabalero no se exponga tanto y tome algunos recaudos, teniendo en cuenta que Aldosivi presenta tres delanteros. Pero Osella no cambia las características de los jugadores. Mantiene cuatro futbolistas de corte ofensivo para ratificar el funcionamiento en ataque, a pesar que seguramente el equipo se pare algunos metros más atrás.
Colón puede ser un equipo más o menos ofensivo según las circunstancias, puede jugar al ataque directo o de contragolpe, resguardarse cerca de su arco o agredir al rival en su campo. Lo que no puede cambiar es el convencimiento en cada decisión que se toma, la convicción que el camino elegido es el correcto. Esa fortaleza se alimenta y a la vez se traduce en la posición que ostenta en la tabla. La clave está en mantenerse siempre en zona de tranquilidad.


B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona A - Fecha 4: Aldosivi vs Colón

viernes, 29 de agosto de 2014

Un partido perfecto

Unión se jugaba muchas cosas esta tarde ante Crucero del Norte. La continuidad del técnico estaba puesta a prueba y el equipo debía responder. El tatengue necesitaba una demostración futbolística convincente para alejar fantasmas, reconciliarse con su gente y marcar un quiebre positivo en un momento clave.
La chapa final con el 3 a 0 a favor resume una tarde perfecta. Porque el rojiblanco logró todos los objetivos que el partido le demandaba. Expuso virtudes en todas sus líneas y alcanzó por primera vez en el torneo un rendimiento parejo a nivel colectivo. Mantuvo su poder de fuego en ataque, pero le agregó solidez en defensa y sobre todo inteligencia para controlar los tiempos del juego.
El conjunto rojiblanco arrancó el encuentro convencido de sus obligaciones. Fue a buscarlo de entrada, achicando espacios y cortando permanentemente el circuito del mediocampo del colectivero. Y además agregándole ritmo a la circulación de la pelota y llegada de los volantes al área rival.
La jugada del penal no cae de forma aislada en el marco de un trámite pobre, es consecuencia de una postura tomada por Unión de jugar el mayor tiempo posible en cercanías del arquero contrario. Luego de la clara infracción de Barraza, Claudio Guerra se encargó de abrir el marcador con una definición precisa al costado izquierdo de Caffa. Así el cuadro de Madelón se fue al descanso con una justa ventaja.
De arranque en el complemento el equipo ratificó su superioridad ampliando la diferencia. Una buena recuperación en la mitad derivó la acción hacia la derecha para que Fabro envíe un centro atrás. El pase lo rescató Ignacio Malcorra que definió de zurda y estampó el 2 a 0.
Allí se presentó un reto para la formación de Madelón: defender la ventaja y evitar que suceda lo mismo que pasó en Tandil. Unión lo logró con firmeza y sin poner nunca en riesgo el triunfo.
Y hasta hubo tiempo para un tercer tanto que aseguró la victoria. Sobre la media hora Guerra asistió de cabeza a Martín Fabro, que definió mano a mano por debajo de las piernas del arquero. Los tres goles de distancia entre un equipo y el otro daban cuenta de forma certera de la superioridad que el cuadro santafesino expuso sobre el elenco misionero.
Unión tuvo una actuación pareja en todos sus jugadores. No hubo puntos bajos, pero sí algunos muy destacados. La aparición hoy de Montero fue muy saludable. En una nueva función como doble cinco, el Memo le brindó al mediocampo el equilibrio que no tenía. Aportó despliegue para la recuperación y dinámica para pasar al ataque. Junto con Guerra fueron los futbolistas más destacados del encuentro. El 9 cumple un rol preponderante. Baja a tres cuartos para pivotear, aguanta la pelota para la llegada de sus compañeros, cede hacia los costados y hasta a veces le alcanza para llegar al área a cabecear. Hace un trabajo muy beneficioso en lo colectivo y últimamente se destaca por sus asistencias. Hoy sumó una más de cabeza en el tercer gol de Fabro.
Muchas veces pasa que, cuando un entrenador está en la picota, los jugadores no responden, no comprenden cómo tienen que reaccionar. Hoy los futbolistas de Unión hicieron lo contrario. El equipo mostró una respuesta anímica y futbolistica sin fisuras. Transmitieron un mensaje muy claro de respaldo y confianza para Madelón.
El tatengue afrontó el encuentro como una verdadera final, de principio a fin. Por eso el efecto positivo del triunfo tienen enormes dimensiones. Unión ganó un partido sumamente trascendente y sumó una victoria imprescindible de cara a su futuro.

B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona B - Fecha 4: Unión 3 – 0 Crucero del Norte

Preguntas al borde del abismo

La conciencia se define en términos generales como el conocimiento que un ser tiene de sí mismo y de su entorno. En latín significa: con conocimiento. Los responsables de las decisiones futbolísticas en el mundo Unión, ¿tienen conocimiento real de lo que está pasando con el equipo y su entorno?, ¿son conscientes del momento que están viviendo?
¿Luis Spahn tendrá plena conciencia que por quinta vez consecutiva se armó un plantel desbalanceado, a exclusivo pedido del entrenador de turno y sin la intervención de algún miembro del club que conozca de fútbol y defienda los intereses de la institución por encima de las ambiciones del DT?
¿Los dirigentes en su conjunto serán conscientes de la interna salvaje que enfrenta a dos facciones de la barrabrava, que la batalla por el poder en la tribuna se reavivó y que los dos episodios de la semana pasada fueron solo el inicio de la guerra?
¿Entenderán los jugadores la importancia de los colores que están usando? Castro, Cardozo, Sánchez, Fabro, Malcorra, Gamba y tantos otros ¿sabrán que a esta camiseta se la pusieron tipos como el fantasma Ruiz, Zanabria, Luque, Mazzoni, Alí, Pumpido, el Pepe Castro, el Beto Acosta, el Loco Marzo, y una lista interminable de glorias? ¿Tendrán percepción de la historia que defienden en cada partido y lo que se están jugando?
¿Leonardo Madelón tendrá real conciencia de lo cerca que está del abismo, que está caminando por una cornisa que se hace cada vez más angosta? ¿Habrá hecho autocrítica hacia adentro en relación a la actuación del equipo en este arranque, reconociendo que se cometen errores en defensa que son básicos para una formación profesional?
Estas preguntas no son casuales, surgen como reacción a partir de actitudes que los protagonistas tienen y que parecen alejadas a la realidad. Spahn se iba a China por cuestiones particulares mientras se definían los refuerzos. Al mismo tiempo que los barras se quisieron matar a golpes en la tribuna y a tiros en la vereda del club, el propio presidente y algunos dirigentes hablan de un “pacto” que los violentos no respetaron y atribuyen los hechos a “escaramuzas que no están relacionadas con la institución”. En tanto, los jugadores no se sacan el cassette, argumentan canchas en mal estado y mala suerte, en vez de reconocer responsabilidades precisas en los partidos que Unión ganaba y terminó perdiendo o empatando. Por su parte, el técnico dejó la sensación de concebir otro escenario luego del empate en Tandil. Madelón dijo que era “un buen punto para cortar la mala racha”, en lugar de admitir que el equipo ya suma cinco puntos perdidos por errores propios.
Mientras los responsables miran para el costado, Unión brinda imágenes muy tristes. La de un equipo superado totalmente en San Francisco por una formación que hace un par de años jugaba el Torneo Argentino, la de un arquero y una defensa que se meten goles solos, la de un conjunto atropellado en Tandil. Allí Santamarina, un club quebrado, sin sede, con estadio prestado y con algo más de cinco mil hinchas en la cancha, estaba feliz solo con el hecho de debutar de local en una categoría donde nunca había jugado. Y de yapa se llevó un empate porque Unión no supo cómo administrar dos goles de ventaja contra un rival débil.
Esas imágenes que generan decepción también se presentan hoy. Si uno toma el diario y ve la tabla de posiciones encuentra al tatengue en el último lugar de la B Nacional, cuando el torneo ofrece cinco ascensos por zona. Esta tarde en la tribuna principal del 15 de Abril, en la histórica “Barra de las bombas”, habrá un espacio premeditadamente vacío por cuestiones de seguridad. Porque los violentos desvirtuaron aquel mote para usarlo como nombre de guerra que identifica una banda de delincuentes.

Unión está en la cornisa. Pone en juego muchas cosas en el partido de esta tarde. Todas estas cuestiones que comentamos son más rivales que Crucero del Norte. Son sus verdaderos fantasmas. Primero tendrá que luchar contra ellos y superarlos, para luego encarrilar su camino en el certamen.
Luego del encuentro de hoy, el tatengue tendrá fecha libre. Eso quiere decir que, si pierde, puede quedar a nueve puntos de la zona de ascenso con solo cinco fechas disputadas. Los responsables del mundo Unión ¿serán conscientes de esto o esperarán a chocarse contra la pared para cambiar el rumbo?


B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona B - Fecha 4: Unión vs Crucero del Norte

martes, 26 de agosto de 2014

Las cosas en su lugar

Colón despejó dudas y completó su mejor rendimiento en lo que va del Torneo de la B Nacional. El sabalero expuso buen funcionamiento colectivo, solidez defensiva, profundidad en ataque y contundencia en el área rival. Virtudes que no había mostrado antes y que anoche acumuló para merecer largamente la victoria.
Hacía mucho tiempo que el equipo rojinegro no transitaba con tanta tranquilidad un encuentro. Nueva Chicago nunca logró inquietar a la formación de Osella, que estableció diferencias en el juego de principio a fin. El elenco de Mataderos ofreció ventajas que Colón aprovechó para imponerse con autoridad.
De arranque allanó el camino con un comienzo arrollador que derivó en la apertura del marcador. A los 7 minutos del primer tiempo, una jugada preparada desde la pelota detenida le dibujó la primera sonrisa al hincha rojinegro y alivió sus ansiedades. En posición de goleador, Lucas Alario recibió un pase de cabeza de Telechea y la mandó al fondo del arco verde y negro para poner el 1 a 0.

A partir de allí, Colón debió superar un desafío. No contagiarse de su pasado, no conformarse con la diferencia mínima, mantener esa postura ambiciosa e ir a buscar el segundo para evitar lo que le había ocurrido en Jujuy. Sin embargo, la salida por lesión de Llama perjudicó el buen juego que sostenía el sabalero y en el tramo final de la primera parte el equipo se retrasó demasiado, aunque no sufrió por la impotencia del rival.
La formación de Osella volvió a la carga en el inicio del complemento y otra vez obtuvo rápido su premio. Villarruel quebró la cintura en la banda derecha y metió un centro a la cabeza de Alario, que definió con un testazo violento para estampar el doblete en su cuenta personal y transformarse en la figura del partido. El segundo gol derribó las posibilidades de un débil Nueva Chicago y cerró el trámite a favor de los santafesinos.

El segundo tiempo transcurrió con tranquilidad para un Colón que selló la goleada sobre la media hora. Poblete armó una buena jugada por la izquierda y tiró un centro bajo para el ingreso de Telechea que no pudo empujarla. La pelota le cayó en los pies a De La Fuente que se durmió y perdió la posición a manos de un rápido Gustavo Villarruel que lo anticipó y definió ante Tauber. Gran premio para uno de los mejores jugadores del cuadro sabalero.

Colón sumó algo más que tres puntos anoche y ganó mucho más que su primer partido en el campeonato. Sumó confianza y convencimiento en la nueva idea de juego que desea imprimir el entrenador. Ganó en recursos en el mediocampo y más juego de ataque, para transformarse en un equipo agresivo que puso las cosas en su lugar y marcó claras diferencias ante un rival recién ascendido desde la B Metropolitana.
El sabalero tomó el camino correcto. La primera estación fue San Luis, continuó en su casa y ahora lo espera Mar del Plata para ratificar la buena senda que lo devuelva a Primera División.

B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona A - Fecha 3: Colón 3 – 0 N. Chicago

lunes, 25 de agosto de 2014

En busca de su nueva identidad

Colón completa hoy ante Nueva Chicago la tercera jornada de la Zona A de la B Nacional. Un grupo en el cual ningún equipo obtuvo puntaje ideal, a diferencia de lo que ocurre con At. Tucumán en la Zona B. Esto le da la chance al sabalero de continuar trabajando para encontrar el mejor funcionamiento sin que las urgencias matemáticas lo acechen. Si consigue un triunfo esta noche se colocará en el segundo lugar de la tabla a pesar de no haber definido aún su perfil de equipo.
Este contexto, sumado a la actuación aceptable en Copa Argentina ante River, le da a Diego Osella la confianza suficiente como para apostar nuevamente por una formación que juegue diferente y que deje atrás, de una vez por todas, esa forma que le brindó resultados en el pasado pero no funciona en el presente.
El técnico elige repetir el esquema inicial 4-4-2, con algunos jugadores versátiles que le pueden permitir al equipo cambiar su fisonomía de acuerdo a las necesidades que presenta el partido. A partir de la lesión de Castillo, Yamil Garnier se mantiene como lateral derecho con la posibilidad de subir al puesto de volante, liberar a Villarruel como extremo, y armar un 3-4-3 si hay que remontar un resultado adverso. Al mismo tiempo, el ingreso de Franco Leys en la zona central de la mitad de la cancha, le permite a Osella ordenarle que se corra al puesto de volante por la banda para diseñar un 4-3-3, si es que se pretende ser más agresivo sin perder el equilibrio. Incluso estas variantes se pueden dar de manera simultánea durante el encuentro, según las necesidades de cada momento del juego.

Con estas decisiones, el DT trata de poblar más la zona de ataque, de convertir a Colón en un cuadro más ambicioso, con ansias de protagonismo y capaz de hacerse fuerte de local para conseguir su primer triunfo en el campeonato. Si lo logra en el cotejo de hoy, dará un paso adelante en la búsqueda de una nueva identidad futbolística que, luego del descenso, necesariamente debía mutar.
El sabalero mostró algunas señales positivas en el partido contra River, un rival de Primera División. Esta noche el contrario es de la misma categoría. Las fuerzas se igualan y tal vez el conjunto santafesino tiene mayores capacidades en la previa. Tendrá que demostrarlo en la cancha. Por lo pronto, la chance parece propicia para ratificar el camino emprendido en San Luis.

B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona A - Fecha 3: Colón vs N. Chicago

Una cuestión de actitud

Unión no puede sacarse la pesada mochila del mal comienzo. Ayer se trajo un punto de Tandil cuando tenía todas las ventajas para conseguir los tres. La historia se repitió. Los errores conocidos en defensa y una debilidad mental que ya preocupa le impidieron al tatengue sumar el primer triunfo del Torneo.
Después de la suspensión del sábado, el equipo de Madelón pudo jugar el encuentro ante Santamarina en condiciones casi normales, más allá que el campo de juego del estadio Municipal era de dimensiones pequeñas y presentaba el césped alto. Esas no fueron excusas para un equipo que hizo un correcto primer tiempo y se encontró, en el arranque del segundo, dos goles arriba en el marcador.
Esto fue posible gracias a que el rojiblanco ratificó que lo mejor lo tiene arriba. Enrique Triverio tuvo una tarde inspirada y fue el autor de los dos tantos. El primero llegó a la media hora de la primera parte, tras una escalada de Zurbriggen por derecha que derivó en un centro a la cabeza del delantero. Mientras que el segundo lo concretó en el amanecer del complemento. Luego de una gran asistencia de Guerra, Triverio definió cruzado ante la salida del arquero.
Dos goles de distancia para un conjunto afirmado en su juego y convencido de sus condiciones es una ventaja casi irremontable. Pero Unión está en las antípodas. Es un cuadro lleno de dudas que conspira permanentemente en contra de sus propias virtudes. Así fue como en tres minutos Santamarina consiguió el descuento y a partir de allí se fueron derrumbando las barreras tatengues.
Madelón gritó desde el banco, metió cambios para agregar gente en el medio que pueda cortar los avances del local y también refrescó las piernas en la ofensiva para que los delanteros puedan sostener la pelota y utilizar el tiempo a favor. Pero nada de esto ocurrió. El equipo se pinchó anímicamente y solo se dedicó a resistir los embates del aurinegro. Sin demasiadas herramientas, con el único recurso de acumular futbolistas en el área rival, el cuadro tandilense llegó al empate a cuatro minutos del final y casi lo gana en la última pelota del partido.
Unión sufre un problema que va más allá de los nombres y los esquemas. Es una cuestión más relacionada a lo mental, a la actitud en función de las circunstancias del juego, que a lo estratégico. El equipo alcanza momentos de lucidez ofensiva que le permiten convertir, pero tiene mandíbula de cristal y con un par de golpes del rival cae fácilmente a la lona.
La misión para Leonardo Madelón es ahora más compleja, ya que la solución parece no estar en cambiar jugadores. El técnico está obligado a elaborar un mensaje que llegue a lo más íntimo de los futbolistas y provoque un notorio cambio de actitud en cuatro días. Porque Unión jugará el viernes contra Crucero del Norte frente a su gente, que tendrá muy poca paciencia y pedirá la cabeza del DT si el resultado es adverso.

B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona B - Fecha 3: Santamarina 2 – 2 Unión

viernes, 22 de agosto de 2014

Problemas de fondo

Unión está viviendo un momento impensado, una realidad que nadie esperaba cuando comenzó este torneo de la B Nacional. Con solo dos fechas disputadas, no sumó puntos, recibió seis goles, tuvo que cambiar el arquero y la mitad del bloque defensivo. Mucho antes de lo imaginado, el tatengue sufre las presiones de un certamen corto y con gran oferta de ascensos que lo obligan a no tropezar.
Leonardo Madelón se encontró con fallas en el lugar que más confiaba. En el receso el técnico decidió fortalecer la zona de ataque y solo retocó el bloque defensivo con el regreso de Barisone y la llegada de Cardozo. El error fue grave y las consecuencias no tardaron en llegar. Solo 180 minutos fueron suficientes para demostrar que se equivocó. Hoy Unión está último en su zona y es el peor equipo de la categoría.
El entrenador solicitó la renovación del arquero Castro y le dio la confianza de seguir como titular. Pero el uruguayo respondió con una actuación débil en el debut y dos errores increíbles contra At. Tucumán. Como era previsible, ante Santamarina el golero será Nereo Fernández, pero además Castro se bajó del viaje a Tandil por decisión propia.

Madelón incorporó a Cardozo en el lateral izquierdo ante la grave lesión de Maidana. Pero el marcador de punta duró un partido. Más allá de sufrir un desgarro, su actuación fue tan baja en San Francisco que probablemente hubiese perdido el lugar igual a manos del pibe Mauri.
La equivocación más notoria se da en el lateral derecho. Unión se desprendió de Vella y el técnico aseguró que no necesitaba traer otro cuatro porque Brítez sería el titular indiscutido en ese puesto. Una decisión que siempre discutimos porque el jugador no había mostrado un rendimiento para merecer esa confianza ciega. Finalmente, Britez es otro de los soldados caídos tras la segunda batalla y su lugar lo ocupará Zurbriggen.
Y, por último, se da una situación muy curiosa con Nicolás Bruna. Madelón presionó a los dirigentes para que renovaran su contrato, confió en él como el primer volante central del plantel, y el jugador tuvo un nivel tan bajo que fue reemplazado en el entretiempo de los dos encuentros y para el próximo pierde su lugar ante el buen momento de Martínez.
Madelón se anotó algunos porotos con la buena elección de los futbolistas que actúan en el bloque de ataque, aunque las fallas en la conformación de la zona defensiva son tan notorias que pesaron más en los resultados obtenidos por el equipo.
Ya es añejo y suena repetido decir otra vez que Unión necesita incorporar un Secretario Deportivo o Manager o Director del Fútbol Profesional o póngale el nombre que más le guste. Por eso solo vale un par de líneas recordar que el fútbol en el mundo hace rato que ha evolucionado hacia la figura de una persona que pueda sentarse mano a mano con el técnico para definir las incorporaciones y aunar los criterios del DT, más cortos en el tiempo, y de la institución, que deben apuntar a un plazo más extenso.
En el horizonte aparece Santamarina de Tandil. Pero el tatengue no jugará solamente contra uno de los debutantes en la categoría. También enfrentará sus miedos, sus limitaciones, los fantasmas de sus errores y la presión de saber que el único resultado que le sirve es la victoria.
Apoyado en sus virtudes ofensivas y tratando de disimular sus debilidades en defensa, Unión tendrá que sacar a relucir el carácter suficiente para sobrellevar el mal momento y comenzar a sumar de a tres. Se vienen dos encuentros clave antes que le toque la fecha libre. Si el rojiblanco no comienza a revertir la historia, si no logra salir del fondo, el panorama promete ser mucho más oscuro.


B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona B - Fecha 3: Santamarina vs Unión

jueves, 21 de agosto de 2014

Mejoró la imagen

Más allá de la eliminación, Colón dejó una buena impresión en su participación en la Copa Argentina 2014. Lejos quedaron aquellos papelones contra Platense o Sarmiento de Junín en ediciones anteriores. Esta vez el sabalero jugó de igual a igual contra dos rivales de una categoría superior y no fue superado por ninguno. Le ganó a Lanús para pasar a octavos y se quedó a las puertas de los cuartos de final luego de caer en los penales ante River.
En San Luis, el equipo sabalero mostró una evolución en su dibujo táctico. Un esquema que, después de trabajarlo algunos partidos, le puede dar un perfil un poco más ambicioso de cara a su misión de retorno a la Primera División. El 4-4-2 que paró Osella le dio al equipo mayor salida por los costados, disimuló las deficiencias de manejo de pelota y le brindó mayor compañía a Lucas Alario.
El centrodelantero fue el jugador más destacado de un primer tiempo en el cual Colón tuvo las acciones más claras. En la primera parte se vio lo mejor del equipo rojinegro, disputándole el balón en el mediocampo al millonario y siendo profundo con las subidas de Villarruel y Llama.
En la última jugada de ese período, Alario le ganó la posición a Funes Mori y remató ante la salida de Chiarini. El arquero tapó el disparo y el rebote le quedó otra vez al 9 que la mandó a guardar. Sin embargo, el árbitro Luis Álvarez invalidó la acción sancionando una infracción del delantero. Fue un error grave del juez al anular un gol lícito, ya que la falta nunca existió.
La historia del segundo tiempo fue diferente. Los cambios de Gallardo renovaron el aire de River y, de la mano de Pisculichi y Simeone, el millonario fue apretando a Colón contra su arco. El sabalero retrocedió demasiado, pudo contener la mayoría de las embestidas pero no tuvo claridad en la salida de contragolpe. Y en la única posibilidad que tuvo a disposición en el complemento, Callejo desperdició su remate cuando quedó mano a mano ante Chiarini.
Broun le contuvo el último disparo del encuentro a Teo Gutiérrez y el trámite se fue a los penales. Allí los elegidos por Osella fallaron y la clasificación quedó para el equipo de la banda. Callejo y Pavón ejecutaron de forma débil y al medio del arco de Chiarini, que contuvo dos de los cuatro remates rojinegros para darle el pase a River.
Colón perdió la chance de seguir en la Copa Argentina, pero ganó en alternativas de juego y en confianza de que se puede ejecutar otro plan. Pensando en el camino que queda por desandar en la B Nacional, el sabalero mejoró su imagen y dio un paso al frente.

Copa Argentina – Octavos de Final: Colón (2) 0 – 0 (4) River

miércoles, 20 de agosto de 2014

Punto de cambio

Colón tiene hoy la posibilidad de poner un mojón que marque un cambio en su rumbo por la B Nacional. La competencia es otra, el sabalero juega por Copa Argentina. Pero justamente la ausencia de presión que presenta la competencia y la aparición de nuevos jugadores en la formación inicial le dan a Osella una oportunidad inmejorable de maquillar el mal comienzo.
A partir de la decisión de su técnico, el equipo rojinegro tendrá algunos nombres alternativos y un esquema táctico diferente. El cuadro santafesino mantendrá los cuatro defensores en el fondo, pero restará un hombre en el mediocampo para agregarlo en la ofensiva. Con este 4-4-2, Osella intentará darle al equipo mayor tenencia de pelota y un poco más de agresividad.
Si bien River pondrá en cancha un elenco alternativo, no deja de ser un escollo para respetar y complicado de superar. Será una muy buena prueba para un Colón que necesita renovar su identidad. Tomar este encuentro como base de un nuevo perfil que luego pueda trasladar a la competencia en busca de uno de los ascensos a Primera División.
Olivera, Ballini, Llama y Telechea son algunos de los futbolistas que además tomarán este compromiso como una alternativa para demostrarle al técnico que pueden integrar el conjunto principal.
Colón busca en San Luis dar un golpe de timón, cambiar su cara y evolucionar hacia un plan más ambicioso. El marco de la Copa Argentina y un rival con suplentes parecen ser el marco ideal para lograrlo.


Copa Argentina – Octavos de Final –Fecha 2: Colón vs River

domingo, 17 de agosto de 2014

Durmiendo con el enemigo

Unión mostró dos versiones de rendimiento muy diferentes y perdió ante Atlético Tucumán porque pesaron más los errores del bloque defensivo que las virtudes que tuvo del medio hacia adelante. El rojiblanco fue un equipo atacando y otro muy distinto a la hora de defender.
Es muy difícil para cualquier conjunto imponerse en el resultado cuando se regalan tres goles, cuando se brindan tantas facilidades para que el rival convierta. Todo lo bueno que hizo el tatengue en ataque fue echado por la borda con tres errores muy graves del arquero y los defensores.
Unión tuvo niveles individuales altos en el aspecto ofensivo. En relación a la última presentación, crecieron jugadores como Fabro, Triverio y Guerra. El cuadro santafesino generó 12 situaciones claras de gol y pudo convertir solo dos tantos por la enorme actuación del arquero Lucchetti, la figura del elenco tucumano. Sin embargo, no le alcanzó porque el bajo rendimiento de los defensores y especialmente del arquero conspiró contra las posibilidades de salir ganancioso en el debut como local.
Promediando el primer tiempo, cuando Unión era superior en el trámite, llegó el primer error de Matías Castro. Un tiro libre de Diego García cayó sobre el área, el uruguayo salió mal y le erró el puñetazo. La pelota siguió su curso y se metió en la valla. En el siguiente ataque, el arquero tapó un remate abajo, el rebote quedó en el área, ningún defensor pudo sacarla y Francsico Grahl la empujó para poner el 2 a 0 cuando Atlético no había hecho nada para merecer esa distancia.
En el final de la primera parte, el tatengue se recuperó anímica y futbolísticamente y consiguió el descuento a través de Enrique Triverio. Ese envión se trasladó al inicio del complemento y allí se vio lo mejor de Unión en el encuentro. Con Claudio Guerra como abanderado, la formación de Madelón apretó al Decano contra su arco y lo llevó por delante hasta los 15 minutos del segundo tiempo. En ese lapso consiguió el empate por medio del penal convertido por Guerra y tuvo el triunfo en un remate que Fabro estrelló en el palo.
Pero la historia terminó en pesadilla porque otra vez Matías Castro fue protagonista de una acción desgraciada en su propio arco. El golero falló nuevamente al cortar un centro y, esta vez, el obsequio fue aprovechado por Javier Malagueño que cabeceó en soledad. El tercer gol del visitante hundió las posibilidades de un Unión que ya había remontado una cuesta empinada y se encontraba otra vez lejos de la cima.
El horizonte tatengue se oscurece, el panorama se complica más de lo previsto con dos derrotas en el arranque y seis goles en contra en 180 minutos. El aspecto principal a corregir se cae de maduro. El técnico Madelón tendrá que trabajar para solucionar las graves deficiencias defensivas que hoy le costaron la derrota. Seguramente en la semana se vendrán cambios. Hay uno cantado: el arquero Matías Castro, que se sacó solo con una actuación para olvidar.


B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona B - Fecha 2: Unión 2 – 3 At. Tucumán

A comenzar de nuevo

La incursión de Unión a San Francisco dejó una sensación común en el mundo rojiblanco: preocupación. La derrota causó sorpresa porque fue inesperada y porque hubo muchos rendimientos que estuvieron por debajo de la media. Madelón tomó nota de esto y de cara al debut como local ante Atlético Tucumán decidió renovar las características del equipo.
El técnico tatengue resolvió meter a Juan Rivas en el mediocampo, desarmando el doble cinco y tomando riesgos importantes para enfrentar a un equipo que también tendrá muchos valores ofensivos de la mitad hacia adelante. Desde el mensaje que envía el DT, Unión asume el rol protagónico del partido, sabiendo que es imperioso conseguir un triunfo para olvidar el mal trago del estreno.
No hay dudas que la vocación rojiblanca será más ofensiva. Pero el tatengue necesitará corregir varias aristas de su funcionamiento para imponerse a la formación tucumana. Porque las fallas ante Sportivo Belgrano estuvieron más relacionadas con el andamiaje colectivo que con una cuestión de actitud. La propuesta de hoy puede ser más agresiva, pero si el cuadro santafesino no resuelve los errores de marca en el retroceso y el cuidado de los futbolistas mejor dotados del rival (en este caso será Luis Rodríguez en el decano), sufrirá tanto o más que en San Francisco.
Una mención especial merece la salida del pibe Martínez. Seguramente Madelón mantiene a Bruna en la formación inicial por su experiencia, porque ha sido capitán del equipo y no por su última actuación. Si fuera por antecedentes inmediatos el juvenil se ganó el puesto. Sobre todo por lo hecho en el segundo tiempo del encuentro pasado, cuando le tocó bancársela como único volante central y respondió con éxito. Pero en este caso pesó más el apellido de Bruna, que tendrá que demostrar virtudes inmediatamente para retribuir la confianza del entrenador.
Unión sale a jugar en casa con un esquema ambicioso, con el objetivo de adueñarse de la pelota y llegar con mucha gente al área rival. No será sencillo para el rojiblanco porque enfrentará a un equipo bien armado, con varios elementos de experiencia y con un técnico (Héctor Rivoira) muy inteligente.
Luego del tropiezo en el inicio, el margen de error se achicó notablemente y tanto los jugadores como Madelón quedaron bajo la lupa del hincha. Por eso el tatengue tendrá que saber manejar las urgencias propias y no contagiarse de la ansiedad que bajará de las tribunas para poder salir airoso de este choque y sellar un nuevo comienzo.

B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona B - Fecha 2: Unión vs At. Tucumán

Puede fallar

Alguna vez podía salir mal. El plan que tantas veces le brindó victorias a Colón, ayer falló. Después de aguantar la diferencia mínima casi todo el partido, y cuando parecía que los tres puntos se encaminaban a Santa Fe, un error del arquero Broun lo dejó al sabalero sin triunfo.
Colón arrancó de forma óptima el encuentro ante Gimnasia. La sociedad Alario-Villarruel le dio frutos en el inicio del juego. El Pipa bancó la pelota en campo jujeño, pivoteó y metió un pase preciso a la espalda de Sánchez. Villarruel atacó el espacio libre y definió cruzado ante la salida de Ojeda. Un comienzo a pedir de Osella. A los seis minutos, el rojinegro ya lograba lo que había ido a buscar. A partir de allí se dedicó a defenderlo.

El cuadro santafesino controló el trámite hasta el primer cuarto de hora, luego fue retrocediendo paulatinamente hasta culminar la primera parte muy cerca de su arco, apretado y sufriendo los embates del elenco local. Esta postura se trasladó al complemento. Colón jugó casi todo el segundo tiempo instalado en su campo y nunca pudo explotar el contragolpe. Cada vez que recuperaba la pelota se desprendía de ella con pelotazos sin destino.
Gimnasia de Jujuy fue un equipo limitado. Más allá de monopolizar la tenencia del balón nunca pudo lastimar por abajo, hasta que entendió que el gol podía llegar por arriba y comenzó a llenar de centros el área sabalera. Por esa vía, Miranda avisó con un cabezazo en el travesaño a la media hora del complemento.
El conjunto de Diego Osella estuvo muy cerca de llevarse el triunfo, pero a un minuto del final resignó dos puntos en una jugada que arrancó con la posibilidad del 2 a 0 para Colón y finalizó en el 1 a 1 para el Lobo. Cristian Llama desperdició el único contragolpe bien armado que tuvo a disposición el visitante durante el juego y en la acción siguiente Miranda selló la igualdad para el local. El delantero ganó por enésima vez de arriba en el área, la pelota picó a los pies de Broun y el aquero, confundido pensando que alguien la iba a desviar, quedó a mitad de camino sin poder detener la pelota que se metió mansita en el arco.

A Colón le falló un plan que habitualmente no se quebraba. Durante el semestre pasado, cada vez que el sabalero se ponía en ventaja construía una muralla y casi nadie podía empatarle. Solo le ocurrió ante Godoy Cruz en la fecha 6 del Torneo Final, cuando Sigali puso el 1 a 1 de cabeza a seis minutos del epílogo.
En otra categoría, en otro torneo, contra rivales que en la previa tienen menor poderío, Colón tendrá que revisar si esa postura es la correcta. Renunciar tan rápido a la posibilidad de atacar defensas que ofrecen ventajas, retroceder exageradamente para cuidarse de ataques que casi no lastiman, es valorar poco las propias capacidades y poner a los rivales en una dimensión que no tienen. Aunque la receta haya funcionado durante el campeonato pasado, y casi lo mantiene al sabalero en Primera, es hora que Colón pase de partenaire a protagonista.

B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona A - Fecha 2: Gimnasia (J) 1 – 1 Colón

viernes, 15 de agosto de 2014

De sur a norte

Colón visitará a Gimnasia de Jujuy con el mismo equipo que venció a Lanús y consiguió la clasificación a la siguiente fase de la Copa Argentina. Diego Osella ratifica el modelo de juego que más resultado le dio en este ciclo. El 4-5-1 que le funcionó frente al granate, gracias a la solidez defensiva y la efectividad en el contragolpe.
Cuando el pensamiento mayoritario indicaba que, con Alario en condiciones de regresar, el sabalero jugaría con una dupla ofensiva, el técnico reforzó sus convicciones en relación al esquema que más lo conforma. Es difícil para Osella despegarse de este libreto. Se nota que a los jugadores les sienta cómodo, les genera confianza. Y además el DT debe preguntarse: si salió bien contra Lanús ¿para qué cambiar?
Sobran los argumentos para reclamar una variante táctica en Colón. El equipo debe ser protagonista en esta categoría y, a diferencia del semestre pasado, tiene material para jugar distinto (Llama, Callejo, Telechea, Pavón, y en poco tiempo Ramírez). El cuadro santafesino debe trabajar para acrecentar sus opciones ofensivas. No se puede pretender ganar un partido si se generan tres ocasiones de gol en 90 minutos y no se tiene máxima efectividad. Esto pasó contra Instituto y Colón no pudo quebrar el cero contra un conjunto que jugó casi un tiempo con diez futbolistas.
Sin embargo, Osella se afirma en su idea y ratifica la formación con mucha población en la mitad de la cancha. Una alineación que dependerá como siempre del éxito en la recuperación rápida de la pelota y la buena puntería para acertar las pocas situaciones que se puedan generar.
Teniendo en cuenta que el equipo jujeño tampoco será demasiado ambicioso, es lógico suponer que los espacios no abundarán y el que primero se anime a salirse del molde tendrá más chances de llevarse el triunfo.
Más allá de la estrategia elegida, Colón necesita encontrar un buen funcionamiento, algo que no mostró en el debut. Independientemente de los nombres, el sabalero está obligado a hacerse fuerte en el norte para encontrar la victoria. Mientras menos postergue la suma de a tres más cerca se sentirá del buen camino.


B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona A - Fecha 2: Gimnasia (J) vs Colón

lunes, 11 de agosto de 2014

Un debut para el olvido

Unión estuvo muy lejos del rendimiento esperado en su debut en la zona B de la Segunda División. El tatengue fue superado claramente por Sportivo Belgrano, que se quedó con la victoria.
El arranque del partido fue inmejorable. A los 2 minutos de juego, un tiro libre de Ignacio Malcorra engañó a todos (incluido Pozo) y se metió por el segundo palo. Así el rojiblanco abría la cuenta en el amanecer del trámite y el camino al triunfo parecía que se allanaba. Pero le duró poco el envión anímico y futbolístico, solo un cuarto de hora.
Cuando el equipo local pudo ajustar algunas piezas en el mediocampo, comenzó a desnudar fallas preocupantes en el rojiblanco, sobre todo del medio hacia atrás. El empate conseguido por César Carignano fue el inicio de un dominio verde que se amplió en el complemento.
En el arranque del segundo tiempo, cuando Unión estaba obligado a mostrar nuevas cartas para ir en busca de un nuevo desnivel, fue Sportivo el que inclinó la balanza con un golazo de Juan Pablo Francia. Nadie marcó al mejor jugador de “la verde”, y el 10 tuvo tiempo de recibir, darse vuelta, elegir el lugar y clavar un derechazo espectacular en el ángulo derecho de Castro.
Desde allí hasta el final, el tatengue paseó su impotencia por el campo del “Oscar Boero”. No pudo sostener poco de lo bueno que había mostrado en la primera parte y tampoco encontró soluciones con el ingreso de los relevos, más allá de amontonar gente en ofensiva. Francia aprovechó esa desesperación ya en tiempo de descuento para colocar una asistencia bárbara hacia el espacio vacío y dejar a Fernando Coniglio en carrera al gol. El delantero desairó fácilmente a Barisone y definió cruzado para coronar la victoria.
Los rendimientos individuales fueron muy bajos. Se esperaba mucho de Fabro, Triverio y Guerra, pero casi no participaron. Los que se destacaron fueron Mauricio Martínez, el mejor del equipo, y Malcorra, que aportó el gol y mayor compromiso con el juego que sus compañeros.
Vale un párrafo aparte la actuación de la defensa. Perjudicados por los errores en el retroceso del mediocampo, los hombres de la última línea casi siempre enfrentaron rivales con mucho espacio por cubrir o en igualdad numérica para marcar. Más allá de esto, no hay forma de justificar el rendimiento del peor jugador del equipo: Emanuel Britez. El lateral derecho estuvo impreciso con la pelota, llegó varias veces tarde a los cruces y fue responsable de las dos jugadas más claras de Sp. Belgrano en el primer tiempo. En el gol del empate, Brítez pifió el rechazo de forma grosera, luego del centro de Insaurralde. Mientras que minutos después, no pudo interceptar un pase sencillo de cortar y dejó a Carigano mano a mano para que el delantero haga estallar el travesaño con su remate.
Unión dejó una pobre imagen en San Francisco. No supo aprovechar la ventaja inicial y fue superado por uno de los rivales más débiles de la zona. La derrota deja muchas cosas por corregir y varios interrogantes por resolver.

B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona B - Fecha 1: Sp. Belgrano 3 - 1 Unión

domingo, 10 de agosto de 2014

Volver al lugar que “se merece”

Cada vez que se desarrolla una pretemporada, cuando se encara un nuevo proceso futbolístico en el mundo tatengue, hay una frase que se escucha de forma reiterada: “vamos a trabajar para devolver a Unión al lugar que se merece”. Cada jugador que llega para vestirse de rojiblanco repite esas palabras, como si se las dictaran de memoria antes de atravesar la puerta de la sede de la Av. López y Planes.
Pero esta vez es distinto. Nunca existieron tantas posibilidades de transformar esa frase hecha en realidad. Es la hora de la verdad para Unión, de cumplir en serio con un mandato que quedó sellado más por historia que por actualidad. La chance que se presenta, a partir del mamarracho de nuevo torneo que diagramaron en AFA, es inmejorable. Habrá que aprovecharla a partir de hoy, sin confiarse.
Leonardo Madelón logró imponerle su sello al plantel. Tuvo libertad para elegir incorporaciones, apuntó bien, y los dirigentes cumplieron con casi todos sus pedidos. A partir de las caras nuevas el equipo luce reforzado en sus flancos débiles, por lo menos en los papeles previos. El técnico decidió fortalecer la zona media y la ofensiva. Llegaron futbolistas que le pueden garantizar a Unión mayor posesión en el medio, presencia ofensiva y, lo más importante, goles. Más de la mitad de los jugadores que arribaron son mediocampistas ofensivos o delanteros. No es casualidad, habla del déficit que mostró el cuadro santafesino el último semestre.
En este contexto, Martín Fabro es la figura más interesante por varios factores. Fue el primero que llegó e hizo toda la pretemporada con sus nuevos compañeros. Fue el volante más goleador de la temporada pasada, es un jugador de grandes capacidades técnicas, con buen remate a distancia y con la capacidad de acomodarse por los costados del mediocampo y también en la función de enlace. Aunque seguramente hoy la ausencia de Montero lo obligará a recostarse más por la derecha. Por supuesto que a partir de ahora tendrá que refrendar esos elogios con una camiseta más pesada que la de Brown de Adrogué, su último equipo.
Hay mucha expectativa en torno a este debut de Unión. Veremos cómo responde el conjunto de Madelón. Si puede absorber y canalizar positivamente sus obligaciones, más allá de la condición y calidad del rival. Este torneo de la B Nacional es un cuchillo de doble afiladura. Hay que saber cómo tomarlo para no cortarse.
Unión empieza esta tarde a transitar una senda que será corta pero muy peligrosa. Habrá poco espacio para los errores y el premio a los aciertos será enorme: devolver a la institución al lugar que “se merece”.


B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona B - Fecha 1: Sp. Belgrano vs Unión

sábado, 9 de agosto de 2014

Bienvenido a la jungla

Colón debutó en la B Nacional con un empate sin goles y un rendimiento de menor categoría que el esperado. El sabalero dejó la sensación de sufrir las condiciones de juego que son un sello de la Segunda División, le costó adaptarse y no pudo establecer diferencias ante un rival que jugó 40 minutos con un jugador menos.
Diego Osella dejó en claro la idea futbolística desde el arranque, y lo profundizó en el complemento. La intención del entrenador fue darle al equipo un perfil más ofensivo colocando a los externos adelantados en el comienzo, y luego en el segundo tiempo tiró el conjunto más adelante todavía con las modificaciones (terminó jugando con cuatro delanteros).
Sin embargo, los futbolistas no pudieron plasmar en la cancha la idea que el técnico intentó transmitirles. Colón no pudo nunca marcar distancias de nivel individual o colectivo ante un Instituto que sufrió varios contratiempos. La Gloria se quedó sin tres de sus cuatro defensores titulares. Los dos marcadores centrales tuvieron que salir lesionados, mientras que Damiani fue expulsado a los 11 minutos de la parte complementaria. El sabalero no aprovechó ninguna de esas ventajas.
Rodrigo Barucco, el arquero visitante, fue el responsable de evitar las tres únicas situaciones de gol que generó el cuadro santafesino. En el primer tiempo le tapó un mano a mano a Telechea y después le sacó a Villarruel un disparo abajo. Mientras que en el segundo fue clave su atajada otra vez ante Telechea cuando faltaba poco para el final.
Hubo actuaciones irregulares y mucho nerviosismo en un grupo de futbolistas que mezcló juventud con falta de conocimiento en estas batallas, y acusó recibo del murmullo que bajaba desde las plateas rojinegras cuando el trámite no reflejaba alteraciones. Gerónimo Poblete fue el único que redondeó un nivel aceptable en el marco de un conjunto que dejó varias aristas por corregir en el futuro inmediato.
La B Nacional es una categoría donde se lucha mucho, hay pocos espacios, los equipos especulan cuando salen de su casa y se busca sacar ventaja en cada detalle. Más allá de las obligaciones naturales que Colón tiene por ser un grande y del perfil ofensivo que quiso imprimirle su técnico, la formación sabalera tendrá que desarrollar nuevos recursos futbolísticos que le permitan establecer diferencias con sus rivales. Sino el camino de regreso a Primera será mucho más sufrido que transitado.

B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona A - Fecha 1: Colón 0 - 0 Instituto

viernes, 8 de agosto de 2014

Un nuevo protagonismo para una nueva historia

La última foto que brindó el estadio Brigadier López este año fue una imagen donde la alegría desbordaba. La cancha era invadida por miles de hinchas sabaleros que festejaban ilusionados una nueva oportunidad de salvar la categoría, luego del milagroso gol de Alario sobre la hora contra Olimpo. Sin embargo, una semana después el Gigante de Arroyito se transformó en la última estación de Colón en Primera División, después de 19 años.
Con esa herida en proceso de cicatrización, hoy el pueblo rojinegro entiende que aquello fue una “desgracia con suerte”. Porque al cuadro santafesino le tocó bajar de categoría justo después que a algunos trasnochados que ocupan sillas en AFA se les ocurriera armar un despropósito de torneo que tendrá 30 equipos. Entonces se hace más fácil dar vuelta la página, olvidar las penas y volver a empezar. El dolor permanece pero es inevitable ilusionarse cuando la oferta es de cinco ascensos en cuatro meses para una zona de 11 participantes.
Más allá de este punto de vista optimista, Colón comienza una historia distinta. A partir de hoy queda de lado aquel mote de equipo heroico, esa suerte de David que superaba consecutivamente y con mucho esfuerzo a los Goliat que se le cruzaban en el fixture para tratar de cumplir con la misión imposible de quedarse en Primera. Este es otro campeonato, el objetivo es distinto y es otra también la obligación. En consecuencia tendrá que ser diferente la forma en la que Osella y sus muchachos busquen alcanzar la meta.
En este receso, el entrenador tuvo a disposición un nuevo contexto de trabajo, con elementos a favor. Tiempo para desarrollar una pretemporada y chances de incorporar jugadores para moldear el plantel a su gusto. Con el correr de los partidos veremos si las decisiones en cuanto a la formación de la plantilla fueron correctas, pero antes que ruede la pelota podemos suponer que Colón tiene material suficiente como para imponer su chapa contra la mayoría de los rivales de la zona. Como para lograr lo que dijo el propio Osella: “transitar lo mejor posible por la categoría, no sufrirla”. Para esto deberá ser más agresivo. El 4-5-1 utilizado ante Lanús sirvió encuadrado sólo en ese encuentro, no puede trasladarse a los partidos que se vienen. El equipo debe cambiar su modelo más allá de los nombres y el esquema. Con los titulares de mañana, Colón puede trocar ese dibujo por un 4-3-3, que refleje otra posición en la cancha, otra actitud motivada por una estrategia diferente. La clave estará en ver en qué lugar de la cancha se acomodan los externos (Callejo y Villaruel). Allí estará la marca distintiva para reconocer la filosofía de juego del conjunto sabalero.
Colón da el puntapié inicial de un sueño que promete ser breve y que busca un final feliz. Para encontrarlo tendrá que superar un gran desafío: ser más ofensivo sin perder las virtudes que lo transformaron en un equipo confiable.


B Nacional – Torneo Transición 2014 – Zona A - Fecha 1: Colón vs Instituto